Suena algo gracioso, cuando
Te mandás alguna de las tuyas;
Tales como
Treparte a la mesa con dos patas
Y lengüetear el plato de comida
A la hora del almuerzo,
Respirarme en la nuca
O estirarte perezosamete
Cuando te colás en la cama de mamá
Y yo duermo ahí
O bien, cuando empezás a
Romperme las pelotas por
Querer salir a fuera a hacer "lo tuyo"
Y, al final, no hacés una mierda (Literalmente)
(Y todo con el puto frío)
Aún así y más (Sí, más),
Por más que te digamos "boba",
"Loca", "boluda", etcétera,
Sos la que nos brinda esa sensación
De adorabilidad, de alegría,
De... de... de...
No sé, nada se me ocurre, pero sos tan bonita
Que hacés que me olvide de mis problemas,
Aún cuando ésto significa encargarme de los tuyos
Umita, querida...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario