Actualmente, tengo 20 años y muchas experiencias vividas, tantas que
valen la pena y otras tantas de las que me arrepiento, en lo que va de
mi corta (?) vida.
La mayoría de edad se alcanza a los 18 años (O eso dicen).
Es decir, a la edad de 18 años ya soy todo un adulto... supuestamente.
Pues si uno tiene 18 años, es mayor de edad; si es mayor de edad, es adulto; si es adulto, es maduro...
Pero no es mi caso, no, para nada...
Yo, tal vez, cumplo con tres de las cuatro cuestiones anteriores:
mayor de 18 años, mayor de edad y adulto...
pero hasta ahí nomás, pues
no soy muy maduro que digamos...
¿Por? No sé, qué sé yo...
Tal vez porque, a veces, suelo reirme de chistes tontos, porque prefiero mirar dibujitos, series de carácter infantil (Como Dragon Ball, Los Simpson -Los capítulos hasta la 15ta temporada, para ser más específico-, Los Pingüinos de Madagascar, Ávatar: La Leyenda de Aang, La Vida Moderna de Rocko, ¡Oye, Arnold!, Drake & Josh y un sinfín más que ni me acuerdo ahora) y películas de igual género que noticias o esos estilos.
No sé, tal vez estés pensando que soy un pendejo inmaduro, ¿pero y qué si lo soy?
Es parte de mí... y no lo pienso cambiar.
Me hace otro tipo, me hace no ser un pichón de un muy posible futuro viejo aburrido y amargado, me hace... diferente.
Yo recomiendo que no reprimas al niño o la niña que todavía hay
en vos, pero... no soy nadie para estar aconsejando, sólo un internauta
bloguero que escribe lo que siente y que lo hace por estar desempleado;
aunque...
Que no sea quién para aconsejarte no significa que sientas que es buen consejo, lo tomen y, sobre todo, lo pongas en práctica...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario